Málaga se promociona en la mayor feria de cruceros de Europa. La cita se celebra del miércoles al viernes de esta semana y permitirá presentar a las compañías de cruceros las cualidades del puerto de Málaga
La ciudad de Hamburgo acoge desde ayer la feria Seatrade Europe, en la que los puertos españoles, el de Málaga con un expositor propio, se ponen al día de las estrategias de las navieras, de los potenciales competidores y de la hoja de ruta de un segmento en plena expansión. Además este evento ha programado sesenta conferencias en las que expertos comenzaron ayer a marcar una hoja de ruta en la que aportan claves en este sector.
En el expositor de Málaga se promociona esta actividad de la mano de la Junta de Andalucía, Turismo Costa del Sol, el Ayuntamiento o Cruceros Málaga. Los responsables de la capital dieron a conocer sus ideas con las que tratan de consolidar la senda de crecimiento y avanzar como puerto base de cruceros (en el inicio y final de los itinerarios). El Puerto quiere ganar la partida en la temporada baja de este sector con la rebaja de hasta un 40% de las tasas portuarias a las navieras que operen en el recinto malagueño en los meses de menos actividad.
Se puso en valor, durante las conferencias, la importancia de contar con un aeropuerto internacional para conseguir dar el salto en los cruceros. Es evidentemente otra de las ventajas que expone la Autoridad Portuaria, que incluye en cada uno de los contactos con las navieras las instalaciones aeroportuarias de Málaga, con capacidad para mover hasta 30 millones de viajeros, y con vuelos directos en la actualidad a más de un centenar de destinos.
El futuro necesariamente pasa por el trabajo conjunto entre puertos y aeropuertos y aerolíneas y navieras para un desarrollo de nuevos productos para hacer más cómodo el viaje previo al crucero y la vuelta a casa. En este modelo ya se está trabajando en Málaga, donde se han llevado a cabo más de una operación en la que el viajero del crucero factura sus maletas en el aeropuerto de origen y se las encuentra en su camarote. En la vuelta deja su equipaje en el mismo y lo recoge en la cinta de la terminal a la que llega.
En la feria se han avanzado buenas expectativas para una industria y la Asociación Internacional de Líneas de Crucero (CLIA) de Europa señaló que el pasado año generó más de 40.200 millones de euros en Europa y que es una cifra que continúa creciendo.
Po otro lado, se ha dado a conocer un informe sobre el impacto económico de este sector en Barcelona elaborado por la Universidad de Barcelona. En el mismo se apunta que los cruceros que recalan en este puerto catalán generan una facturación de 796 millones de euros anuales de forma directa, indirecta e inducida y aportan 413 millones al PIB de la región, a la vez que mantienen 6.759 empleos y se traducen en unas rentas fiscales de 152 millones en impuestos estatales, autonómicos y tasa turística.
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